El secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, subrayó este miércoles al inicio de la reunión con su homólogo surcoreano, Suh Wook, que la alianza entre los dos países es “más importante que nunca” ante la situación que plantea Corea del Norte.
Austin aterrizó este miércoles en la base aérea de Osan (sur de Seúl) procedente de Tokio, para reunirse en la capital surcoreana con su homólogo, según informó la agencia Yonhap.
El jefe del Pentágono insistió al comienzo de la reunión en que la alianza entre ambos países cobra más importancia que nunca porque encaran “desafíos sin precedentes” por parte de Corea del Norte y también de China.
“Nuestro compromiso con la alianza Estados Unidos – República de Corea (nombre oficial de Corea del Sur) continúa blindado”, añadió Austin, que se ha convertido en el primer funcionario del Gobierno del presidente estadounidense, Joe Biden, en visitar Corea del Sur, donde estará hasta el viernes antes de partir hacia India.
El secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin al llegar a la base aérea de Osan en Pyeongtaek, Corea del Sur, el 17 de marzo de 2021. Chung Sung-Jun / Pool vía Reuters
Las palabras de Austin parecen refrendar la idea de que Washington quiere enmendar y fortalecer una alianza que el expresidente Donald Trump dañó con su exigencia de renegociar el tratado de libre comercio o instando a Seúl a pagar hasta cinco veces más por el mantenimiento de tropas de EE.UU. en su territorio.
Se cree que la nueva estrategia de la Casa Blanca y sus aliados regionales para afrontar la cuestión norcoreana es uno de los principales temas de la visita de Austin.
Este miércoles está prevista también la llegada a Corea del Sur, procedente de Japón, del secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, quien se reunirá con el jefe de la diplomacia surcoreana, Chung Eui-yong.
El secretario de Estado, Antony Blinken, y el secretario de Defensa, Lloyd Austin. REUTERS/Kim Kyung-Hoon/Pool/Foto de archivo
Blinken y Austin celebrarán a su vez el jueves un “2+2” con Chung y Wook, en el que los planes para abordar el programa nuclear norcoreano y la paz en la península ocuparían un lugar central.
El Gobierno de Biden aún no ha hecho pública su estrategia para lidiar con Pionyang, que en enero anunció que probaría nuevas armas si Washington no daba con una nueva fórmula para retornar a la mesa de diálogo y negociar un proceso de paz y de desarme.
El viaje de Austin y Blinken coincide además con un mensaje emitido el martes por Kim Yo-jong, la hermana del líder norcoreano Kim Jong-un, en el que condenó las maniobras conjuntas de Seúl y Washington e insinuó retomar las mencionadas pruebas de armas.