El pasado 11 de junio, una trágica noticia sacudió el ámbito del entretenimiento y los negocios en Turquía. Victoria Vera Blyth, reconocida presentadora de televisión y cantante, fue asesinada por su esposo, David Thomas Blyth, un prominente magnate del petróleo. Tras cometer el crimen, Blyth se quitó la vida en su residencia en Ankara, Turquía.
La triste noticia fue confirmada por Alexandra Vera, hermana de Victoria, a través de su cuenta de Instagram: «Con profunda tristeza y dolor tengo que anunciar que mi querida y hermosa hermana, el sol de nuestras vidas que nos trajo tanta alegría, con su risa, su espíritu positivo, su empuje y energía, nos ha dejado para siempre.
Por favor, os lo ruego a todos, dadnos tiempo por el bien de los niños. Mi familia está pasando por un momento muy difícil porque perdieron a ambos padres.
Recientemente, enterramos a nuestro padre y ahora a nuestra hermana y cuñado y necesitamos tiempo para recuperarnos, pero sobre todo necesitamos estar aquí para los niños”.
David Thomas Blyth, de 53 años, era un empresario destacado y propietario de la petrolera internacional ASG Inspection. Nacido en Edimburgo, se casó en 2014 con Victoria Vera, quien tenía 40 años. La pareja tuvo tres hijos durante su matrimonio. Aunque aún se investigan las causas del incidente, algunos medios internacionales sugieren que una discusión provocada por mensajes de texto pudo haber desencadenado el trágico suceso.
En una entrevista meses antes de su muerte, Victoria había compartido sus planes para futuros proyectos, pero también mencionó su preferencia por no planificar en exceso debido a la imprevisibilidad de la vida.
Tras el asesinato, David Blyth se suicidó. Los cuerpos de la pareja fueron encontrados en su casa en Turquía. Se ha informado que el cuerpo de Victoria permanece en Turquía, mientras que los restos de David han sido repatriados a Escocia, donde reside su familia.
Un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Commonwealth y Desarrollo del Reino Unido declaró: “Apoyamos a la familia de un británico que murió en Turquía y estamos en contacto con las autoridades locales”. Asimismo, un representante del Ministerio de Asuntos Exteriores de la República Checa confirmó: “Puedo confirmar que un ciudadano checo murió violentamente en Türkiye. Nuestra embajada en Ankara está en contacto con su familia y le proporciona asistencia consular. En cuanto a los supervivientes, no daremos más información”.
Esta tragedia ha dejado a tres niños huérfanos y a dos familias en duelo, enfrentándose a un proceso de recuperación emocional tras la pérdida de sus seres queridos en circunstancias tan devastadoras.