Un oficial de la Infantería de Marina de Estados Unidos fue arrestado el jueves acusado de participar en el violento asalto del 6 de enero al Capitolio por partidarios del expresidente Donald Trump, informó el Departamento de Justicia.
El comandante Christopher Warnagiris es el primer oficial en servicio activo en ser acusado por el ataque, en el que cientos de partidarios de Trump irrumpieron en la sede del Congreso y bloquearon la sesión que confirmó a Joe Biden como ganador de las elecciones presidenciales de noviembre.
Warnagiris, de 40 años, fue acusado de agredir o resistirse a agentes del orden, obstrucción a la aplicación de la ley y obstrucción a la justicia.
El Departamento de Justicia dijo que tenía un video de Warnagiris empujando “violentamente” a los agentes y abriéndose paso por las puertas del Capitolio junto con otros.
Es una de las 440 personas acusadas hasta ahora en la investigación del departamento sobre este ataque.
Más de una cuarta parte de ellos han sido acusados de agredir o obstaculizar la aplicación de la ley.
Varios miembros de milicias antigubernamentales y supremacistas blancos también enfrentan cargos de conspiración violenta, y se cree que el Departamento de Justicia está sopesando cargos de sedición más graves en su contra.
Los fiscales aún están preparando los casos y se espera que el primer juicio comience en junio.
En abril, Jon Schaffer, miembro de los Oath Keepers, uno de los grupos que presuntamente lideraron el ataque, se declaró culpable de ingresar ilegalmente al Capitolio y se cree que está cooperando con la investigación de otros miembros del grupo.
La presencia de cuatro miembros de la Guardia Nacional en servicio y 40 veteranos militares entre los arrestados por el ataque al Capitolio impulsó al Pentágono a realizar sesiones informativas sobre la amenaza del extremismo en las filas.
En un comunicado, el cuerpo de Marines confirmó la identidad de Warnagiris, que trabajaba en su base en Quantico, Virginia.
“No hay lugar para el odio racial o el extremismo en el Cuerpo de Marines”, señaló. “Nuestra fuerza deriva de la excelencia individual de cada marine, independientemente de su origen. La intolerancia y el extremismo racial van en contra de nuestros valores fundamentales”