21 de febrero de 2025

controlandoelejido.com

Tu Portal digital dominicano en new york

Crisis política en Nueva York: ¿quién asumiría si Eric Adams sale de la alcaldía

Si Eric Adams renuncia o es forzado a abandonar el cargo de alcalde Nueva York, ¿quién asumiría el puesto? El actual Defensor del Pueblo, Jumaane Williams, un demócrata que ha sido férreo crítico de su gestión.

“Estamos en un momento de crisis. Es evidente que el alcalde está envuelto en sus propios problemas y sigue siendo difícil verlo. La tarea del resto de los que ocupamos cargos electos es impedir que sus problemas personales arrastren a nuestra ciudad a la crisis junto con él”, afirmó Williams el martes en Twitter/X.

“El alcalde no puede gobernar de la manera en que la ciudad de Nueva York necesita ser gobernada”, dijo además Williams en declaraciones a NBC News. “Necesitamos un alcalde para la ciudad de Nueva York, no un diputado de la Casa Blanca”, agregó en referencia al supuesto pacto entre Adams y el mandatario republicano Donald Trump de retirarle los cargos federales a cambio de que apoye su promesa electoral de deportaciones masivas.

Adams asumió el cargo el 1 de enero de 2022 manteniendo la hegemonía del Partido Demócrata en la ciudad. Oficialmente su período terminaría el 1 de enero de 2026 e incluso podría presentarse a la reelección por cuatro años más si ganase las primarias del Partido Demócrata en junio de 2025, pero eso luce cada vez más improbable, pues ya antes de las acusaciones le habían surgido varios retadores y las encuestas no lo ayudaban.

En la historia de Nueva York, la ciudad más poblada de EE.UU., dos alcaldes han dimitido: Jimmy Walker en 1932 y William O’Dwyer en 1950, ambos demócratas que salieron tras escándalos de corrupción.

Adams lleva meses sumido en escándalos, desde que en septiembre se convirtió en el primer alcalde de NYC en ejercicio en ser acusado en una investigación federal. Si no renuncia, la carta orgánica de la ciudad otorga a la gobernadora Kathy Hochul el poder de destituirlo, algo que cada vez más líderes locales le están pidiendo.

Otra opción legal para sacar al alcalde es convocando un “comité de incapacidad” formado por cinco personas y al menos cuatro de ellas deberían votar a favor de la salida. El grupo, en teoría, incluiría en este momento al contralor Brad Lander, la presidenta del Concejo Municipal, Adrienne Adams, y el presidente del condado Queens, Donovan Richards. Los otros dos serían un vicealcalde actual y el asesor legal de la alcaldía.

En cualquier virtual salida de Adams, Williams llegaría a la alcaldía de manera temporal y tendría que convocar a nuevas elecciones. “Según la ley, un alcalde interino tiene tres días para fijar la fecha de una elección especial para elegir a un nuevo alcalde”, destacó en septiembre The New York Times.

“Cuando el gobierno federal no hizo nada mientras sus políticas de inmigración fallidas sobrecargaban nuestro sistema de refugios sin ningún alivio, puse a la gente de Nueva York por delante del partido (Demócrata) y la política”, insistió el alcalde al ser acusado.

La última vez que Nueva York vivió un sismo política de esta magnitud fue en el verano de 2021, cuando el poderoso gobernador (D) Andrew Cuomo fue forzado a renunciar bajo acusaciones de acoso sexual, siendo sustituido justamente por su vicegobernadora Hochul, la primera mujer en la historia en liderar el poder ejecutivo estatal.

La crisis migratoria ha marcado la gestión de Adams, en medio de una batalla política nacional entre demócratas y republicanos. En el verano de 2023 el alcalde declaró que la llegada masiva de inmigrantes “destruirá” a la ciudad, alegando falta de recursos y apoyo del gobierno de Joe Biden.

Dos meses después, en noviembre, le surgió otra crisis: Adams tuvo que interrumpir un viaje a Washington DC y volver a Nueva York al trascender que agentes del FBI habían confiscado sus dispositivos electrónicos, incluyendo su iPad y teléfono. Esos equipos luego fueron retornados. Días después también fue demandado por Lorna Beach-Mahura por un supuesto abuso sexual cometido en 1993, cuando él era oficial de NYPD.

La sombra de Trump: ¿amigo o enemigo?

El lunes10 de febrero los cargos en contra de Adams por supuesta corrupción fueron suspendidos desde Washington DC por orden del Departamento de Justicia (DOJ). La gobernadora Hochul ha calificado las acusaciones del supuesto pacto entre Trump y Adams de “extremadamente preocupantes y graves” y al parecer ha estado solicitando opiniones de poderosos compañeros demócratas y de sus asesores.

Pero el martes 11 Hochul reiteró que no lo destituiría porque anular la voluntad de los votantes que lo enviaron al Ayuntamiento “no parece algo muy democrático”. Pero las presiones no han cedido, como tampoco las malas noticias alrededor de Adams.

El jueves 13 Trump negó estar detrás de la movida emitida por Emil Bove, fiscal general adjunto interino del DOJ y ex abogado personal del mandatario en el caso penal donde fue condenado en un juicio por falsificar registros comerciales.

Siete fiscales renunciaron en protesta en Nueva York y Washington DC. Incluso uno de ellos, Hagan Scotten, envió una carta mordaz a Bove argumentando que sólo un “tonto” o un “cobarde” aceptaría firmar la desestimación del caso contra Adams, citó ABC News.

El lunes 17 cuatro de los principales adjuntos del alcalde Adams renunciaron y la gobernadora Hochul dijo que la situación “es preocupante y no se puede ignorar”. El alcalde había hablado con los cuatro el domingo para disuadirlos de irse o retrasar su decisión, según ABC News.

Los cuatro vicealcaldes habían sido nombrados para estabilizar el gobierno de la ciudad después de las salidas anteriores de alto perfil de personas del círculo íntimo de Adams investigadas por fiscales estatales y federales en casos separados. Otros han salido alegando razones personales.

Desde la semana pasada líderes cívicos y funcionarios electos han aumentado la presión sobre la gobernadora demócrata para que invoque su autoridad y destituya a Adams de su cargo.

“Muchos quieren que Hochul obligue a Adams a dejar el cargo. Ella no tiene prisa. Aunque la gobernadora tiene el poder de iniciar un proceso de destitución contra el alcalde, hacerlo pondría a prueba la historia, el tiempo y sus propias preferencias”, comentó el viernes The New York Times.

Desde su triunfo electoral en noviembre el alcalde de Nueva York se ha acercado al polémico mandatario. Tanto Adams como Trump -quien ha sido uno de los pocos que han salido en su defensa- han dicho que los cargos federales surgieron por haber cuestionado las políticas migratorias del entonces presidente Biden, un tema que según muchos analistas a la larga inclinó la balanza hacia el reciente avasallante triunfo electoral republicano.

El inicio del juicio contra Adams, un demócrata que antes fue republicano y se rumora podría volver a serlo, había sido fijado para el próximo 21 de abril.

Tras el anuncio de su supuesto perdón, Adams dijo que firmaría una orden que permitiría a los oficiales federales de inmigración ingresar al complejo Rikers Island, la cárcel más grande de la ciudad de Nueva York. Y el jueves 13 se reunió en Nueva York con el llamado zar fronterizo de Trump, Thomas Homan, mientras el gobierno republicano busca deportar a personas acusadas de delitos. Adams no habló con la prensa tras ese encuentro a puerta cerrada.

Trump había dicho en diciembre que él y Adams fueron “perseguidos” por los fiscales del gobierno de Biden y que consideraría indultarlo. El caso formal de cinco cargos acusó a Adams de aceptar por años regalos de viajes de lujo a cambio, entre otras cosas, de persuadir al Departamento de Bomberos (FDNY) para que aprobara la apertura del nuevo consulado de Turquía en Manhattan a pesar de las persistentes preocupaciones de seguridad de los inspectores.

Adams y sus defensores podrían impugnar cualquier acción de la gobernadora en los tribunales o al menos exigir el derecho a defenderse contra un procedimiento de destitución. Una medida de Hochul también enfurecería casi con certeza al gobierno de Trump.

Y hay más tensiones entre la Casa Blanca y la gobernación de Nueva York. El miércoles 12 de febrero Pam Bondi, la nueva fiscal general de Estados Unidos nombrada por Trump, aprovechó su primera conferencia de prensa oficial para anunciar que demandará al estado Nueva York, así como a la gobernadora Hochul, la fiscal general estatal Letitia James y Marc Schroeder, el comisionado del Departamento de Vehículos Motorizados (DMV) del estado, alegando que sus políticas limitan la cooperación con las autoridades federales de inmigración.

Cinco meses de crisis aguda

Sobre el “perdón” a Adams, las críticas han sido fuertes. Y por otras causas su entorno ha sido notoriamente sacudido en los últimos meses.

Las casas de cinco altos funcionarios de su gobierno fueron allanadas por las autoridades federales el 4 de septiembre de 2024. Desde entonces renunciaron el Comisionado de NYPD Edward Cabán -el primer hispano en ocupar ese cargo en la historia-, el canciller escolar David Banks, los vicealcaldes Philip Banks y Sheena Wright, y el Comisionado de Salud, Dr. Ashwin Vasan, cada uno expresando su propia razón. Ninguno de ellos ha sido acusado de ningún delito.

A principios de noviembre renunció la novia de Adams, Tracey Collins, funcionaria del Departamento de Educación de la ciudad. Igualmente ese mes se abrió una investigación penal sobre un comité de acción política formado para apoyar a Adams por el reverendo Alfred Cockfield II, un pastor de Queens que en 1998 se había declarado culpable de traficar cocaína.

En diciembre hubo acusaciones federales por supuesto soborno que llevaron a la salida de la principal asesora del alcalde, Ingrid Lewis Martin. También poco antes de la navidad renunció el jefe policial (NYPD) Jeffrey Maddrey, bajo alegatos de acoso sexual a una subordinada. En enero el FBI allanó su hogar en Queens y otros lugares vinculados a él.

Aunque el alcalde ha insistido en su inocencia, dos aliados suyos han admitido responsabilidad en el caso. El mes pasado un magnate inmobiliario de Brooklyn, Erden Arkan, se declaró culpable de conspiración, admitiendo que trabajó con un funcionario del gobierno turco para canalizar contribuciones ilegales de campaña a Adams en 2021.

Luego este mes trascendió que Mohamed Bahi, ex asistente del alcalde que se desempeñó como enlace principal del Ayuntamiento con la comunidad musulmana, planea declararse culpable de un cargo de conspiración en el caso de corrupción.

Todos los cargos son meras acusaciones y se presume que las personas procesadas son inocentes hasta que se pruebe su culpabilidad en un tribunal.