En una soleada mañana de enero, el petrolero New Knok se trasladó hasta un astillero en la provincia china Fujian para hacer reparaciones. Fue un evento por lo demás rutinario, excepto por dos detalles.
El primero, los operadores del barco transmitieron un nombre de embarcación falso, una práctica engañosa que a menudo se usa para disfrazar los orígenes de una embarcación. Y segundo, el New Knok fue señalado por las Naciones Unidas por entregar petróleo ilícitamente a Corea del Norte.
El barco no fue confiscado ni reportado por las autoridades chinas.
Nuevas imágenes satelitales obtenidas por The New York Times muestran que China ha permitido que el New Konk y otros buques similares utilicen sus infraestructuras y aguas territoriales para introducir petróleo en Corea del Norte, socavando así las sanciones internacionales. El Consejo de Seguridad de la ONU pidió a los Estados miembros que incauten en su territorio los buques que se cree que están implicados en la violación de las sanciones.
Los productos petrolíferos refinados, como el combustible, no sólo son cruciales para la economía general de Corea del Norte, sino también para su programa nuclear y de misiles balísticos, objetivo de las sanciones. Las importaciones de productos petrolíferos refinados, actualmente limitadas a 500,000 barriles al año, son un punto de presión esencial para los países que están a favor de fuertes sanciones económicas para Corea del Norte.
China apoyó la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que restringe las importaciones de combustible de Corea del Norte. Pero las imágenes muestran que el país ha estado dispuesto a hacer la vista gorda ante las violaciones.
EL ASTILLERO
Para rastrear las actividades de buques como el New Konk, el comité de sanciones contra Corea del Norte del Consejo de Seguridad de la ONU cuenta con el apoyo técnico de su Grupo de Expertos (Foto ilustrativa: Reuters)
Las imágenes de satélite analizadas y entregadas por el Times a la empresa Planet Labs muestran el New Konk en un río de la ciudad costera de Ningde, en el noreste de China, el 1 de enero de 2021. Las dos imágenes, tomadas con unas dos horas de diferencia, muestran al New Konk mientras se adentra en el dique seco del astillero, la zona de un astillero que se utiliza para la reparación o construcción de buques.
Para rastrear las actividades de buques como el New Konk, el comité de sanciones contra Corea del Norte del Consejo de Seguridad de la ONU cuenta con el apoyo técnico de su Grupo de Expertos, que investiga e informa sobre las violaciones de las sanciones. China, miembro permanente del Consejo, participa en la decisión de cómo responder a las recomendaciones del panel.
Las nuevas imágenes de satélite demuestran que China ha ignorado algunas de esas recomendaciones, incluida la prohibición de los puertos a nivel mundial.
“El panel de la ONU denunció al New Konk ante el Consejo de Seguridad, China aceptó el informe, pero permite que este barco, recomendado para una prohibición portuaria global, entre en sus astilleros para ser reparado”, dijo Hugh Griffiths, consultor experto en sanciones y ex coordinador del panel, en una declaración escrita sobre los hallazgos de The Times. “Esto no tiene buena pinta”.
LA BASE DE OPERACIONES
China apoyó la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que restringe las importaciones de combustible de Corea del Norte (Foto ilustrativa: Reuters/Darren Abate)
El enfoque de no intervención de China con respecto a los petroleros vinculados a Corea del Norte también es visible en la bahía de Sansha, a 30 millas sureste del astillero de Ningde. La zona se ha convertido en una base de operaciones para los petroleros vinculados a Corea del Norte.
Una imagen satelital de noviembre de 2020, analizada por el think tank Royal United Services Institute (RUSI), muestra media docena de petroleros que han sido identificados públicamente por la ONU como proveedores de petróleo ilícito a puertos o petroleros norcoreanos. También se ve un barco de la marina china, que aparentemente patrulla la zona.
Uno de los barcos que se ve en las imágenes de satélite es el Diamond 8, un buque que ha sido objeto de una reciente investigación del New York Times y de un nuevo informe de RUSI y del Centro de Estudios Avanzados de Defensa, un think tank con sede en Washington, D.C.
“Las recomendaciones del grupo de expertos de la ONU, las fotografías y las imágenes por satélite ofrecen motivos razonables para creer que estos buques han violado las resoluciones”, dijo Griffiths. “Pero por el momento, China está dando a esos buques un puerto seguro”.
Otro barco en la bahía de Sansha es el Yuk Tung, que el Consejo de Seguridad incluyó en la lista negra en marzo de 2018. China está obligada a tomar medidas contra el Yuk Tung porque ha sido designado por el Consejo de Seguridad como violador de las sanciones.
El barco ha estado inactivo en aguas chinas desde al menos enero de 2020, según la revisión de las imágenes satelitales hecha por el Times. Las autoridades chinas declinaron responder cuando se les preguntó si el barco había sido confiscado o denunciado al comité de sanciones de la ONU.
En su lugar, proporcionaron un comentario adaptado de una rueda de prensa del 2 de diciembre de 2020 de Hua Chunying, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, en la que pedía al Consejo de Seguridad de la ONU “que iniciara las discusiones sobre la retirada de las sanciones” contra Corea del Norte.
Un portavoz de la Misión de Estados Unidos ante la ONU también declinó comentar los detalles de las conclusiones de The Time, pero declaró que “esperamos que los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU den ejemplo.”
EL BENEFICIARIO
Las nuevas imágenes de satélite demuestran que China ha ignorado algunas de esas recomendaciones, incluida la prohibición de los puertos a nivel mundial (Foto ilustrativa: Reuters)
En el último año, Corea del Norte ha ampliado su infraestructura petrolífera, construyendo una nueva terminal petrolera en el importante puerto de Nampo, donde los petroleros que alberga China entregan regularmente su petróleo.
Según estimaciones de algunos estados miembros de la ONU, Corea del Norte ha superado el tope anual de 500,000 barriles al año desde que la medida entró en vigor el 1 de enero de 2018. Tanto China como Rusia, otro miembro permanente del Consejo de Seguridad, han rebatido estas afirmaciones.
Se espera que el gobierno de Biden dé a conocer los detalles de su política hacia Corea del Norte en las próximas semanas. Y su enfoque dependerá probablemente de la gestión de las frías relaciones con China, que el presidente Biden ha descrito como el reto más importante de la política exterior del país.
El objetivo de la desnuclearización es un área en la que los funcionarios estadounidenses esperan que China y Estados Unidos puedan encontrar un terreno común. Pero la inactividad de China en relación con los petroleros que entregan petróleo a Corea del Norte puede obstaculizar el camino, dijo el Sr. Griffiths. “Anulan algunas de las medidas más importantes que frenarían, si no detienen, estos programas prohibidos por la ONU”.