Claudia Dobles Camargo llegó al despacho de la primera dama de Costa Rica en 2018. Desde entonces, ha ejercido un rol muy activo que la llevó a ser considerada por la revista Fortune como una de las 50 líderes más influyentes del mundo en el año 2019.
Así, con la llegada de Carlos Alvarado Quesada a la Presidencia, Dobles pensó que «lo más adecuado era poner al Servicio de Costa Rica» sus conocimientos y enfocarse en el sector en el que tenía experiencia profesional, en este caso, la infraestructura, la movilidad, la planificación urbana o el ordenamiento territorial.
«Las primera damas poco a poco van a ir ejerciendo en el siglo XXI un rol que va a ir más acorde con los conocimientos y los intereses que cada una de ella pueda aportar», reflexiona sobre su papel en estos últimos años.
Así, su reconocimiento internacional, como admite, viene de la mano de su participación en la gestión y elaboración del Plan Nacional de Descarbonización y «de un reconocimiento del rol de la mujer en la lucha contra el cambio climático», afirma Dobles.
Hacia la reducción de la huella de carbono
La primera dama explica que el Plan Nacional de Descarbonización no es solo una herramienta en la lucha contra el cambio climático: «Es una visión integral del desarrollo que queremos para Costa Rica, basado en el talento humano, en el conocimiento, en energías limpias y en innovación», relata.
«El planteamiento para todo el sector agrícola e industrial es mejorar los procesos y darle un valor agregado a los productos en un mercado competitivo»
Así, cuenta cómo la Agenda 2030 se incorpora en ese Plan, que tiene algunos ejes fundamentales para el país centroamericano para generar empleo y desarrollo y para bajar la huella de carbono y descarbonizar la economía.
Uno de ellos es el que se desarrolla a partir de la agroindustria, donde se busca una transformación generando buenas prácticas con criterios de sostenibilidad: «El planteamiento para todo el sector agrícola e industrial es mejorar los procesos y darle un valor agregado a los productos en un mercado competitivo», afirma.
Apostando por la movilidad sostenible
El despacho de la primera dama se centra más en el eje del ordenamiento territorial, transporte y movilidad, que a su vez tiene varios objetivos. Por un lado, «la electromobilidad y la transición de flota vehicular de combustibles fósiles a cero emisiones«, relata Dobles, y por otro, «generar un sistema de transporte público eficiente, seguro y confiable que atraiga a más personas», agrega.
Así, por un lado se busca que la ciudadanía cambie el transporte privado por el público, y por el otro el cambio del parque móvil actual por otro no contaminante.
«Costa Rica tiene una matriz eléctrica que es prácticamente cien por cien renovable. Sin embargo, nuestra matriz energética sigue siendo sucia, sobre todo por sectores como el del transporte»
Según sostiene Dobles, Costa Rica tiene esta transición más fácil que otros Estados, debido a que «su matriz eléctrica ya es prácticamente cien por cien renovable». Sin embargo, explica, «sigue siendo sucia, sobre todo debido a ciertos sectores, como el del transporte, que sigue usando combustibles fósiles como fuente de energía».
Además, en la actualidad Costa Rica tiene una sobreproducción de electricidad, que hace que incluso esté exportando a los países limítrofes.
Avanzando en la equidad de género
Por otro lado, entrevistada asegura que «Costa Rica ha tenido importantes avances en la equidad de género», pero que aún se está lejos de llegar al punto de equidad real. Sin embargo, señala un hito, que el país «en este momento tiene un gabinete que no es paritario, sino mayoritariamente de mujeres«.
Así, aunque Dobles constata que «Costa Rica sigue teniendo problemas de violencia contra las mujeres y hay feminicidios» y que todavía no se ha llegado a la meta en esta cuestión, sí se han llevado a cabo «acciones importantes, contundentes, de política pública y también de referencia para ir avanzando en ese camino hacia la equidad real de género».
Dobles defiende los motivos por los que cree que su país se ha convertido en un símbolo de estabilidad en la región: «Tenemos una tradición de paz, de diálogo, de democracia. Tenemos una democracia muy sólida, una de las más sólidas en toda la región. Hay un respeto institucional. Hay un peso histórico de las buenas decisiones que el país ha tomado«.
Para conocer todas las opiniones de la primera dama de Costa Rica sobre estos y otros temas, les invitamos a ver la entrevista completa.