Este martes la sesión de la Asamblea de Bolivia fue interrumpida por una pelea entre dos parlamentarios. Cuando el ministro del Interior, Eduardo del Castillo, se disponía a responder a una interpelación sobre la detención de la expresidenta de Bolivia, Jeanine Áñez, comenzó una trifulca.
El conservador senador de la oposición, Henry Montero, del partido Creemos, y el parlamentario del gobernante Movimiento al Socialismo (MAS), Gabriel Antonio Colque, desarrollaron una pelea, lanzando y encajando puñetazos, que acabó con ambos contrincantes en el suelo.
Montero se había acercado hasta la tribuna y había increpado al presidente de la Cámara, Freddy Mamani, que acababa de declarar un cuarto intermedio de 10 minutos ante la tensa sesión. Entonces Colque se acercó para tratar de alejarlo de la tribuna y en el forcejo se desató la refriega, según relata la Razón. La sesión se reanudó tras el abandono del Pleno de Montero, quien poco después pidió disculpas por «tan lamentable espectáculo».
Por su parte, Colque aseguró que no es la primera vez que la oposición ataca física, psicológica y verbalmente. «Ha sido una nueva prueba de que se dirigen a nosotros con racismo y discriminación«, prosiguió, «ellos tratan de buscar confrontación y conflicto para hacernos reaccionar», añadió.
Jeanine Áñez, acusada de sedición, conspiración y terrorismo
La conservadora Jeanine Áñez se autoproclamó presidenta interina en noviembre de 2019, tras el golpe de Estado contra el presidente Evo Morales, que se vio obligado a dimitir y abandonar el país presionado por los militares.
El gobierno de facto de Áñez duró apenas un año, después de que las elecciones organizadas por su Gabinete fueran ganadas de nuevo por el MAS, esta vez encabezado por quien fuera ministro de Economía de Morales, Luis Arce.
Desde mediados de marzo la exmandataria se encuentra en prisión preventiva, y se enfrenta a un proceso judicial en el que se le acusa de los delitos de sedición, conspiración y terrorismo.