Quienes han perdido a un pariente a causa de COVID-19 ahora podrán solicitar ayuda del gobierno federal para los costos del funeral, incluso si la muerte sucedió hace meses y la persona era un extranjero indocumentado, según la Administración Federal de Manejo de Emergencias (FEMA).
Sin embargo, la persona que haga el trámite sí debe ser un ciudadano estadounidense o poseedor de tarjeta de residencia (green card). Los solicitantes elegibles recibirán un cheque por correo o un depósito directo en el banco, dependiendo de la opción que elijan en el trámite. Según informes, podrían recibir hasta $9,000 dólares.
La reciente Ley de Asignaciones Suplementarias de Respuesta y Alivio del Coronavirus (CRRSAA) y el Plan de Rescate Estadounidense crearon el fondo para que FEMA brinde asistencia financiera a los gastos funerarios relacionados con COVID incurridos después del 20 de enero del año pasado.
FEMA abrirá el fondo de reembolso a los solicitantes el 12 de abril, anunció el líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer, y la representante Alexandria Ocasio-Cortez, quienes trabajaron con la agencia para desarrollar el programa.
Según FEMA, los solicitantes de asistencia deben cumplir con los siguientes requisitos:
-El deceso debe haber ocurrido en EE.UU., incluyendo territorios como Puerto Rico.
-El certificado de defunción debe indicar que la muerte se atribuyó a COVID-19
-La persona que solicita asistencia debe ser un ciudadano de EE.UU. o un inmigrante calificado que haya incurrido en gastos de funeral después del 20 de enero de 2020. Sin embargo, la persona fallecida sí puede haber sido un extranjero indocumentado.
¿Cómo inscribirse?
La fecha de la aplicación se abre el 12 de abril. Llame al número de línea de asistencia funeraria COVID: 844-684-6333 | TTY: 800-462-7585, de lunes a viernes, de 9 a.m. a 9 p.m. hora del Este. También se puede consultar esta página en español.
¿Qué papeles son necesarios?
Documentación para verificar la identidad de la persona -el “pariente más cercano”- que llama y su relación con el fallecido.
-Un certificado de defunción que enumera la muerte del difunto como relacionada con COVID-19, de acuerdo con las pautas de los Centros de Control de Enfermedades (CDC).
-Documentación de todos los costos asociados con el funeral.
Hasta ayer, más de 50,000 neoyorquinos habían muerto de COVID-19, la mayoría en NYC. El proyecto de ley de ayuda COVID-19 aprobado en diciembre de 2020 destinó $2 mil millones de dólates para asistencia funeraria y entierros. Aproximadamente $260 millones de esos fondos se destinarán a los neoyorquinos, especialmente a familias que viven en los vecindarios más afectados por la pandemia, muchas de las cuales son comunidades de color y de bajos salarios, lo que les ha generado grandes deudas y pérdidas de ingresos, acotó Pix11.