Tras frustrar el asesinato del CEO de una empresa fabricante de armamento Rheinmetal, Berlín se toma muy en serio las informaciones sobre un complot y afirma no se dejará amedrentar por la intimidación rusa, dijo el gobierno alemán este viernes.
Dicho complot formaba parte de una serie de planes rusos para asesinar a ejecutivos de la industria de defensa en toda Europa que apoyan el esfuerzo bélico de Ucrania.
Rheinmetall, uno de los mayores productores mundiales de proyectiles de artillería y tanques, no confirmó de forma directa las informaciones, pero afirmó en un comunicado que “siempre se toman las medidas necesarias” para la seguridad, en consulta periódica con las autoridades.
“No nos dejaremos intimidar por Rusia y seguiremos haciendo todo lo posible para prevenir las amenazas rusas en Alemania”, declaró la ministra alemana del Interior, Nancy Faeser.
El Kremlin negó las informaciones, basadas en fuentes anónimas, y dijo que no podían tomarse en serio.
El grupo de defensa germano Hensoldt, que produce tecnología de radar para el sistema de defensa aérea IRIS-T utilizado en Ucrania, anunció una reevaluación de sus medidas de seguridad. La división de armamento de Diehl, que fabrica el IRIS-T y también produce munición, declaró que sigue de cerca la situación y adaptará sus medidas de seguridad si es necesario.
Por su parte, un portavoz de BAE Systems afirmó que cuentan con “medidas de seguridad muy rigurosas, que se revisan constantemente”, aunque declinó hacer más comentarios.
Armin Papperger se ha erigido como una pieza clave en el apoyo occidental a Ucrania en su defensa contra Rusia, un estatus que le ha costado estar bajo la amenaza del Gobierno ruso, pues a Moscú se le acusa de planear un atentado contra este empresario germano.
Son muchas las iniciativas de Papperger que sitúan a este ingeniero en una posición destacada en Alemania y Ucrania, pues ha convertido a su empresa en uno de los principales proveedores de la ayuda militar a Kiev aprobada por el canciller Olaf Scholz.
Con más de 30.000 trabajadores y un volumen de negocios de 7.200 millones de euros en 2023, Rheinmetall produce buena parte de los sistemas del ingente material militar que Alemania ha puesto en manos del Ejército de Ucrania, como los tanques Leopard o los vehículos de combate de infantería Marder, además de munición, incluidos obuses de artillería de 155 milímetros.