El presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abás, rechazó categóricamente la propuesta del mandatario estadounidense, Donald Trump, de expulsar a los palestinos de la Franja de Gaza y reasentarlos en otros países. Abás reafirmó que Gaza es una “parte integral” del Estado palestino y advirtió que no permitirá violaciones a los derechos de su pueblo.
“No permitiremos que los derechos de nuestro pueblo, por los que llevamos décadas luchando y por los que hemos hecho grandes sacrificios, sean vulnerados”, declaró Abás en un mensaje difundido por la agencia oficial de noticias palestina, Wafa.
El rechazo se produce después de que Trump, en una rueda de prensa junto al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, afirmara que Estados Unidos tomará el control de Gaza y la reconstruirá, convirtiéndola en la nueva “Riviera de Oriente Medio”, pero sin los palestinos, a quienes propone reasentar en otros países de forma permanente.
En su mensaje, Abás subrayó que los derechos del pueblo palestino “no son negociables”, y que “nadie puede decidir sobre el futuro de Palestina excepto los propios palestinos”. También agradeció el respaldo de Arabia Saudí, que ha rechazado la expulsión forzosa de los habitantes de Gaza, y pidió a la ONU tomar medidas urgentes para garantizar el cumplimiento de las resoluciones internacionales que protegen el derecho al retorno de los palestinos desplazados por Israel.
Por su parte, Huséin al Sheij, secretario general de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), también rechazó el plan de Trump y reafirmó que la única solución viable para la paz en Oriente Medio es la creación de dos Estados, uno palestino y uno israelí. “Aquí nacimos, aquí vivimos y aquí moriremos”, sentenció.
El plan de Trump ha sido bien recibido por sectores de la política israelí, especialmente por la extrema derecha, que ha instado a Netanyahu a ponerlo en marcha de inmediato.
En contraste, el grupo islamista Hamás, que gobierna en Gaza, calificó la propuesta de “racista”, asegurando que los palestinos “seguirán apegados a su tierra y no aceptarán ese plan, sin importar el costo”.
A pesar de haber hecho campaña con la promesa de retirar a Estados Unidos de los conflictos en Oriente Medio, Trump no descartó enviar tropas para garantizar la reconstrucción de Gaza bajo su visión.
“En lo que respecta a Gaza, haremos lo que sea necesario. Si es necesario, lo haremos. Nos haremos cargo de esa parte y la desarrollaremos”, declaró el mandatario, dejando abierta la posibilidad de una intervención directa y de largo plazo en la región.
Esta es la primera vez que Trump sugiere que los palestinos deben ser expulsados permanentemente de Gaza y que EE.UU. podría asumir un rol activo en su control y transformación. La comunidad internacional ahora espera cómo evolucionará esta polémica propuesta en un contexto ya tenso entre Palestina, Israel y las potencias globales.
