La ministra de Interior y Policía, Faride Raful, ha tomado acciones legales contra la comunicadora Ingrid Jorge y el abogado Ángel Martínez por presunta difamación e injuria.
La instancia, depositada el pasado 30 de mayo, se fundamenta en graves acusaciones de difamación, daños y perjuicios, así como en afirmaciones falsas que vinculan a la funcionaria con actividades ilícitas y conductas sexuales inapropiadas.
La querella fue depositada en la Procuraduría Especializada en Crímenes y Delitos de Alta Tecnología a través del abogado Miguel Valerio Jiminián.
Raful defendió su derecho a la intimidad y al honor, exigiendo responsabilidades por los señalamientos que buscan manchar su reputación. La ministra confía en que la justicia actuará con contundencia para proteger sus derechos y sentar un precedente contra la desinformación malintencionada.
El abogado Valerio Jiminián dijo que la querella penal busca no solo esclarecer los hechos, sino también sancionar a los responsables por la presunta comisión de delitos vinculados a la difamación y el hostigamiento.
Este caso vuelve a poner sobre la mesa la preocupación por el uso inadecuado de plataformas digitales y medios para dañar la reputación de personas, en especial de figuras públicas.
