Durante la eucaristía celebrada en la parroquia San Juan Bosco, en la capital, los abrazos y los gestos de cariño se entrelazaron con un firme pedido de justicia por la pérdida de los esposos Agustín Méndez y Arisleidy Díaz.
La familia, visiblemente afectada, expresó su dolor y su voluntad de mantenerse unida para honrar la memoria de sus seres queridos.
Danny Méndez, familiar de los fallecidos, compartió el profundo impacto que ha dejado la tragedia. “La familia está destrozada y están unidos para tratar de seguir adelante en memoria de los esposos Agustín Méndez y Arisleidy Díaz”, afirmó durante la ceremonia, donde las lágrimas y los abrazos fueron una constante entre los asistentes.
El llamado a seguir adelante, pese a la tristeza, también estuvo presente en las palabras del sacerdote que ofició la homilía. En su mensaje, alentó a los presentes a buscar fuerzas para continuar, incluso en medio del dolor profundo que embarga a todos los que conocieron a la pareja.
Un momento especialmente emotivo fue relatado por un amigo de las víctimas, quien participó como rescatista en la tragedia y logró recuperar los cuerpos de sus amigos.
“En un momento, cuando ya tenemos la bolsa ahí para sacar sus pertenencias, su padre lo estaba llamando ahí. Tenía el celular, yo sabía que era porque decía Papi. Qué terrible es sabe que el padre de un amigo tuyo esté llamando”, relató, dejando en evidencia el dolor que marcó esa recuperación.
La pérdida de Agustín Méndez y Arisleidy Díaz deja una profunda estela de dolor entre familiares, amigos y toda la comunidad que les conoció.
Este sentimiento se reflejaba en los rostros de quienes estuvieron presentes en la eucaristía, particularmente en aquel amigo que tuvo que reconocer los cuerpos, un acto que deja una huella imborrable en su memoria.
La misa en la parroquia San Juan Bosco se convirtió en un acto de homenaje, pero también en un espacio donde el dolor colectivo encontró eco en la demanda de justicia para los esposos fallecidos, cuyo recuerdo permanecerá como un llamado permanente a la solidaridad y la búsqueda de respuestas claras sobre las circunstancias que rodearon su partida.
