A finales de diciembre, falleció otra mujer tras someterse a una cirugía estética con el infame doctor Edgar Contreras, quien ha llevado dolor y luto a numerosas familias desde 1998, cuando el programa N Investiga de la periodista Nuria Piera, presentó la primera de una extensa y amplísima lista de acusaciones de malas prácticas en su contra, que ha continuado durante 27 años.
Es preciso destacar que, existen otros casos que no han salido a la luz pública, porque en base a negociaciones económicas con los familiares y pacientes afectadas, así como terrorismo judicial demandando a diestra y siniestra a todo aquel que enfrente su mal accionar, ha logrado burlarse de la justicia.
En esta ocasión, la víctima más reciente es Pamela Almánzar, cuya historia es presentada a continuación de la mano de entrevistas con autoridades de Salud Pública, a los fines de saber cuáles medidas están tomando ante este caso que involucra a Edgar Contreras, quien tal vez no tenga la ética, precisión y habilidad de un buen cirujano plástico, pero sin dudas, en los últimos 30 años, se ha convertido en todo un especialista en esquivar la prensa, la justicia y a los pacientes afectados.
Persio Jiménez, padre víctima Pamela Almánzar, residente en el sector de Herrera, expresó que vive una pesadilla desde el fallecimiento de su hija de tan solo 28 años de edad.
“Tengo la autoestima súper baja. Yo no rebajo. Yo me mantenía en las mismas libras y los senos grandísimos. No me bajaba la barriga, terrible y me sentía muy deprimida, porque en el gimnasio me fajaba como una desgracia”, explicaba Almánzara a una amiga en un audio que le envió.
El 16 de diciembre, acude al consultorio del cirujano plástico, Edgar Contreras, en el Centro Médico y Diagnostico Arroyo Hondo (CEDIAH), aun cuando conocía el cuestionable historial de malas prácticas, muertes y mutilaciones que pacientes y sus familiares han denunciado en N Investiga desde 1998.
A través una conversación de whatsapp, Pamela le informa a una amiga su decisión y esta reacciona: “¿Y ese no es el que Nuria denunció?”, a lo que ella responde “ese mismo”. Su interés era realizarse una reducción de senos ante los constantes dolores de espalda. Sin embargo, según familiares y amigos, durante la consulta, el cirujano trata de convencerla de que también se realice una abdominoplastia y liposucción de brazos y piernas aun cuando la joven le había advertido que tenía biopolímeros en los glúteos.
El costo de la operación fue de 250 mil pesos, de los cuales la joven llegó a transferir 220 mil pesos, como se evidencia en este comprobante del 13 de diciembre, tres días antes de someterse al procedimiento, ya que le ofrecieron la facilidad de pagar en cuotas los 30 mil pesos restantes.
Llegó el día de la operación y tan pronto finalizó el procedimiento, sufrió malestares y dolores más fuertes de los normales y dificultades para respirar. En esta conversación que tuvo con una amiga vía whatsapp, dijo: “me pusieron dos pintas de sangre porque me desmayé varias veces y él me lipó muchas cosas más que no iban en los planes”. Se refiere a que no solo le habían reducido los senos, sino que le habían hecho las demás operaciones sugeridas.
La Resolución 000009, emitida por Salud Pública, en 2019, prohíbe realizar más de dos cirugías estéticas mayores y un procedimiento complementario en un solo tiempo quirúrgico.
El 26 de diciembre, 12 días después de la operación, al no resistir más el malestar acude nuevamente a la clínica, donde fallece ese mismo día por un tromboembolismo pulmonar, un bloqueo en una de las arterias que puede ser causado por encamamiento prolongado y daño directo de las venas durante cirugías.
El doctor Contreras se negó a proporcionar mayores detalles de la muerte de la joven a su pareja, Dahiana Ymaya López, alegando que ella no era familiar directo.
A quien el doctor le ha dado la cara es al padre del hijo de la joven fallecida, José Ariel Alifonso Camacho, quien, a pesar de no ser la actual pareja de la fallecida, el pasado 3 de enero firmó el acta de descargo y desistimiento de acciones, donde se establece que Pamela Almánzar “firmó con su puño y letra el consentimiento informado de las cirugías donde se explican los riesgos”.
Gerardo Mesa, director de Habilitación Salud Pública, expresó que, “estos momentos no pueden dar detalles del caso porque aún se encuentra en fase de investigación”, al tie4mpo que aseguró que los quirófanos de Contreras se mantienen cerrados hasta que concluya la investigación.
El presidente de la Sociedad Dominicana de Cirugía Plástica, Reconstructiva y Estética Inc. (SODOCIPRE) el doctor Aniceto Rodríguez, afirmó que cada cierto tiempo hay reuniones a las que son convocados distintos actores del sector que intervienen la cirugía plástica para discutir las normas.
En tanto que, el padre de la fallecida Pamela Almánzar manifestó su confianza en que la labor de las autoridades.
N Investiga da seguimiento a la evolución de la investigación que llevan a cabo las autoridades con la esperanza de que el caso de Pamela Almánzar no quede impune como las decenas muertes y malas prácticas denunciadas públicamente contra Edgar Contreras durante los últimos 27 años.
