La llegada del huracán John a la región de la Costa Chica en Guerrero generó una gran preocupación entre la población y las autoridades, debido a las intensas lluvias y el riesgo de saqueos en las tiendas comerciales de Acapulco.
Ante esta situación, fuerzas del Ejército, la Guardia Nacional, la Marina y la Policía Estatal se desplegaron para resguardar la seguridad en supermercados y centros comerciales.
El presidente de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo de Acapulco (Canaco-Servytur), Alejandro Martínez Sidney, solicitó a las autoridades tomar medidas de seguridad ante posibles actos de rapiña como los ocurridos tras el paso del huracán Otis en octubre de 2023.
Pidió que se reforzara la vigilancia en establecimientos como Sam’s Club, donde algunos intentaron saquear mercancías.
A pesar de la intervención de las autoridades, el martes 24 de septiembre un grupo de personas intentó ingresar a tiendas en busca de productos, pero se encontraron con los cuerpos de seguridad.
La SSP estatal exhortó a la ciudadanía a mantener la calma y no difundir información no verificada, mientras continúan los esfuerzos para mantener el orden público.
“La Secretaría de Seguridad Pública invita a la población a mantenerse informada a través de los canales oficiales y a seguir las indicaciones de Protección Civil para salvaguardar su integridad”, dijo la SSP en un comunicado.
El impacto económico de los saqueos tras el huracán Otis ascendió a 390 millones de pesos, y se teme que un fenómeno similar podría repetirse si no se refuerzan las medidas de seguridad.
La Canaco advirtió que, de no obtener respuesta por parte del gobierno, los comerciantes afectados dejarían de pagar impuestos durante un año.
