Juan Cedillo, hombre de 69 años, fue extraditado a Westchester (NY) bajo cargos de fraude migratorio tras ser arrestado al otro lado del país en Olympia, estado Washington.
El sospechoso de haber estafado a inmigrantes indocumentados mediante un elaborado plan fue arrestado el 8 de julio y llegó extraditado a Westchester el miércoles 24, donde quedó detenido sin derecho a fianza.
Cedillo fue identificado luego de una larga investigación realizada por el Departamento de Policía de Yonkers en 2019 y acusado de robar decenas de miles de dólares a las víctimas.
Según las autoridades su plan se centró en inmigrantes indocumentados que eran padres de niños nacidos en Estados Unidos a quienes afirmó que por $8,000 dólares podría ayudarlos a obtener una visa que los conduciría a un camino hacia la ciudadanía.
En noviembre de 2019 la Oficina del Fiscal de Distrito del condado Westchester anunció que un gran jurado había emitido una acusación formal de 87 cargos contra Cedillo. El entonces fiscal distrital Anthony Scarpino Jr. dijo que las estafas habían ocurrido entre noviembre de 2013 y febrero de 2019 e incluyeron 17 víctimas de Yonkers que buscaban servicios de asistencia para inmigrantes.
En ese momento Cedillo fue enviado a la cárcel y le impusieron una fianza de $25,000 dólares. Después de su liberación en 2020 durante la pandemia hizo varias comparecencias virtuales ante el tribunal desde el estado Washington, pero no se presentó en persona cuando más tarde le dijeron que lo hiciera.
Originalmente a Cedillo se le había ofrecido un acuerdo de culpabilidad con una pena no superior a los cuatro años de prisión. Pero ahora podría enfrentar cargos de violación de la libertad bajo fianza y una sentencia más larga si es declarado culpable. Todos los cargos son meras acusaciones y se presume que las personas procesadas son inocentes hasta que se pruebe su culpabilidad en un tribunal.
Los expertos recuerdan a la comunidad que las promesas de eliminar la burocracia son comunes en las estafas de inmigración. Algunos de los victimarios “Pueden estar haciéndose pasar por un funcionario del gobierno y diciendo: “Tienes que pagar esta cantidad de dinero si quieres que tu caso de asilo avance”, comentó Elizabeta Markuci, del grupo Caridades Católicas, que desempeñó un papel clave en la ayuda a las presuntas víctimas de Cedillo.
“No pague en efectivo a nadie que ofrezca ayuda de inmigración, entonces no habrá rastro documental, no habrá forma de procesar y no tendrá antecedentes, y es muy inusual que un abogado le pida dinero en efectivo”, recalcó Markuci.