Diez ucranianos que llevaban años retenidos fueron liberados el viernes de su cautiverio ruso con la mediación del Vaticano, dijo el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy.
Algunos de los civiles liberados habían sido capturados antes de la ofensiva rusa. El Papa ha dicho que la Santa Sede ha estado involucrada en canjes de prisioneros anteriores durante la guerra en Ucrania.
Entre quienes recuperaron la libertad estaba Nariman Dzhelyal, vicepresidente del Mejlis, un órgano representativo de los tártaros de Crimea que se reubicó en Kiev cuando Moscú tomó el control de la región. Fue detenido en Crimea, donde vivía a pesar de la anexión, un año antes del comienzo de la guerra.
El jefe del Mejlis, Refat Chubarov, y el líder tártaro de Crimea, Mustafa Dzhemilev, lo abrazaron después de casi tres años de cautiverio.
Dzhelyal dijo que muchos ucranianos siguen en cautiverio: “No podemos dejarlos allí porque las condiciones, tanto psicológicas como físicas, son muy aterradoras”.
Los exprisioneros, envueltos en banderas azules y amarillas, se reunieron con sus familiares en Kiev y se pusieron en contacto con quienes no pudieron estar allí. En algunos casos, la separación había durado muchos años.
“Tengo muchas ganas de abrazarte. Pronto estaré contigo, mamá”, dijo Isabella Pekh, hija de la historiadora del arte liberada Olena Pekh, a través de una videollamada. “Siento mucho no haber podido ir”.
Durante casi seis años, Isabella Pekh intervino en conferencias internacionales y pidió ayuda a embajadores internacionales para liberar a su madre, que fue detenida en la parte ocupada de la región de Donetsk. Al final, sus esfuerzos tuvieron recompensa.
“Fueron seis años de un infierno que no se puede describir con palabras. Pero sabía que tenía a mi patria, que tenía gente que me quería, que tenía a mi hija”, contó Olena Pekh.
Entre los liberados se encontraban dos sacerdotes greco-católicos ucranianos. Uno de ellos, Bohdan Heleta, fue detenido en 2022 en el interior de su iglesia en la ciudad ocupada de Berdiansk, en la región de Zaporiyia.
“Hay muchos de nuestros hombres y mujeres allí”, indicó Heleta sobre los que siguen encarcelados. “Necesitan ayuda, ayuda concreta. Lo están esperando”.
El papa Francisco en un discurso el sábado pidió la liberación de todos los prisioneros de guerra y agradeció a Dios por la liberación de los dos sacerdotes.
Zelenskyy en una publicación en X escribió: “Estoy agradecido a todos los que ayudaron. Agradezco a nuestro equipo que trabaja para liberar a los prisioneros. También quiero reconocer los esfuerzos de la Santa Sede para traer a estas personas a casa”.
Según el Cuartel General de Coordinación para el Tratamiento de Prisioneros de Guerra de Ucrania, 3.310 ucranianos han sido liberados de su cautiverio ruso. Pero muchos miles más, tanto civiles como militares, siguen encarcelados.