Santiago. – En medio del dolor y la angustia, familiares y vecinos esperan la llagada del cuerpo sin vida de la mujer que fue asesinada a tiros por su pareja sentimental, quien además mató a su hijastro en un hecho ocurrido en la residencia que ambos compartían Brooklyn, Nueva York.
Con pesar y tristeza la familia se prepara para recibir este miércoles en esta ciudad los cadáveres de Rosa Acevedo de 52 años y de su hijo Gustavo Devora Acevedo de 26 años quienes fueron asesinados por Luis Collado de 52 años.
La tragedia ha tocado fuertemente a Leísi Díaz, quien era la esposa de Gustavo Devora Acevedo, el cual cuenta le había prometido estar con ella “pero paso”, por lo que ahora dice sentir un hueco en su corazón desde que recibió la noticia de la muerte su pareja con la cual tenía varios años juntos.
Consuelo Ozoria, quien conocía la pareja se mostró consternada y lamentó el hecho trágico, ya que dijo no esperaban eso del homicida.
“Él era loco con esa muchacha… Uno le decía a ella y la aconsejaba que lo dejara, pero ella no encontró el camino, nunca, porque él no le dio espacio”, sostuvo Ozoria quien clamó justicia por el crimen.
Mientras, Yohan Manuel Ulloa allegado a la familia de la víctima expresó que la comunidad de Villa Verde está ciudad no sale del asombro consternada ante el suceso ocurrido.
Allegados a Yohan al igual que, José Ulloa manifestaron que Rosa Acevedo, quien tenía cuatro años viviendo en Estados Unidos estaba construyendo una vivienda a su madre y definieron a su hijo con un buen muchacho.
Los familiares de las victimas definieron como una persona celosa a Luis Collado por lo que sabía que cualquier momento mataría a su pareja con cual tenía 12 años de casados.
En la calle 12 de villa verde esperan los restos del hijo y su madre que están previsto a llegar al país a eso de las 9: 00 de la noche.
Rosa y Gustavo luego de que sean velados en la casa de la familia les darán cristiana sepultura en el cementerio municipal, San Bartolo de Gurabo de Santiago.
El suceso ocurrió el sábado a las 7:00 p.m. cuando las autoridades encontraron a Rosa y a su hijo con múltiples heridas de bala en su residencia.