Durante estos días, las candidatas al Miss Universo están participando en sesiones de fotos, entrevistas, pasarelas y ensayos para perfeccionar su presentación en el gran evento que será el próximo sábado 18 de noviembre. Además, tienen la oportunidad de conocerse entre ellas, intercambiar experiencias y crear lazos de amistad.
Estas mujeres representan la diversidad y la belleza de diferentes países y culturas, y cada una busca ganar el codiciado título de Miss Universo. Para ello, ponen todo su esfuerzo y dedicación en cada uno de los aspectos que se evalúan, desde su apariencia física hasta su actitud y habilidades de comunicación.
Jane Dipika Garrett es la representante de Nepal y ha cautivado al público y a los jueces por romper los estereotipos de belleza tradicionales en la industria. Su presencia en el certamen ha sido un avance importante hacia la inclusión y la diversidad en el mundo de la belleza.
Jane ha utilizado su plataforma para promover la aceptación del cuerpo y la autoestima, inspirando a muchas mujeres a amarse y valorarse tal como son. Su presencia en el certamen ha generado conversaciones importantes sobre la necesidad de tener una representación más amplia de la belleza en los medios de comunicación y en la moda.
El hecho de que Jane haya logrado llegar tan lejos en el certamen demuestra que la belleza no tiene un solo estándar y que todas las mujeres, independientemente de su talla, pueden ser hermosas y exitosas. Su valentía y determinación son un ejemplo para todos, recordándonos que no hay límites para lo que podemos lograr.
Sin duda, la enfermera y empresaria ha dejado una huella imborrable en el certamen de belleza, abriendo nuevas puertas para modelos de talla grande y demostrando que el atractivo no se limita a un cuerpo en particular. Su éxito es una victoria para la diversidad y la inclusión en la industria de la moda, y seguramente inspirará a muchas otras mujeres a seguir sus sueños sin importar su talla.