Un hombre armado que se había atrincherado en una casa con tres rehenes disparó contra los agentes que intentaban rescatarlos, causando la muerte de uno de ellos y heridas a otro en un trágico suceso que conmocionó a Austin, Texas.
El hecho ocurrió alrededor de las 3:00 a.m., cuando la policía recibió una llamada de una mujer que decía que la estaban apuñalando. Los oficiales llegaron al lugar y encontraron a un hombre armado con un cuchillo que había tomado como rehenes a tres personas, entre ellas una niña. Uno de los rehenes logró escapar y le dijo a la policía que el hombre tenía un arma de fuego.
Los oficiales trataron de entrar a la casa, pero el hombre les disparó y tuvieron que retroceder. Se solicitó la ayuda de un equipo SWAT, que llegó al lugar y forzó la entrada a la residencia para intentar liberar a las víctimas. Sin embargo, el hombre volvió a disparar contra los agentes, que respondieron al fuego.
En el tiroteo, dos agentes y el sospechoso resultaron heridos de bala. El sospechoso murió en el lugar y los dos agentes fueron trasladados a un hospital, donde uno de ellos falleció y el otro se encontraba en condición estable. Los agentes que entraron a la casa también encontraron a dos de los rehenes sin vida.
El agente que perdió la vida fue identificado como el oficial Jorge Pastore, de 24 años, que llevaba dos años en el Departamento de Policía de Austin y formaba parte del equipo SWAT y de la Guardia de Honor. Le sobreviven su esposa, dos hijastros, sus padres y dos hermanas. El agente herido, cuya identidad no se ha revelado, se recupera de sus lesiones.
El sospechoso y los otros dos rehenes fallecidos tampoco han sido identificados por las autoridades, que están investigando las causas y los motivos del incidente. De acuerdo con algunos medios locales, el sospechoso tenía antecedentes de violencia doméstica y podría haber estado involucrado en una disputa por la custodia de la niña.
