El expresidente Trump compareció el lunes ante el juez para responder a las denuncias de la fiscal general de Nueva York, Letitia James, de fraude civil, en el que está acusado él y sus dos hijos, Donald Trump Jr. y Eric Trump.
“Esto es realmente una interferencia electoral”, declaró este lunes el expresidente y candidato presidencial republicano en la corte, quien también catalogó de “guerra política” el proceso judicial en su contra.
Asimismo, Trump minimizó la importancia de las “declaraciones de situación financiera” anuales que, según la demanda, estaban plagadas de fraude: “en realidad no eran documentos a los que los bancos prestaran mucha atención”, testificó en declaraciones recogidas por New York Post.
“Trato con bancos desde hace 50 años. Probablemente, conozco los bancos mejor que nadie”, añadió Trump. “Miran el acuerdo, miran la ubicación… no quieren involucrarse en los estados financieros”.
El expresidente Donald Trump haciendo una declaración cuando llegó a testificar en la corte de Manhattan en su juicio de fraude civil.
Los tres acusados y la Organización Trump han sido señalados por la fiscal demócrata James de conformar un plan de décadas de duración en el que el expresidente exageró “desmesuradamente” su patrimonio neto en hasta $3,600 millones de dólares al año, acusaciones que el aspirante presidencial republicano ha rechazado.
En su defensa, Trump ha declarado previamente que sus activos estaban en realidad infravalorados, afirmando que sus estados financieros tenían cláusulas de exención de responsabilidad, y pidió a los bancos que verificaran las cifras.
Asimismo, Trump ha calificado la investigación y la demanda de James, que duraron años, como una “vergüenza” y un ataque a su negocio y a su familia.
El republicano también ha acusado a James de actuar por motivos políticos y de intentar dañar su reputación y su carrera. Pero James ha negado cualquier sesgo político, e indicó que su demanda está basada en las pruebas y los hechos.
Sin embargo, James sostiene que los hijos del expresidente, incluida Ivanka, que llegó al tribunal como testigo, así como sus socios y empresas, realizaron “numerosos actos de fraude y falsedad” en sus estados financieros.
El juez de Nueva York que lleva el caso, Arthur Engoron, emitió un fallo en septiembre que determinó que Trump y la Organización Trump cometieron fraude mientras construían su imperio inmobiliario al engañar a bancos, aseguradoras y otros al sobrevalorar sus activos y aumentar su patrimonio neto en la documentación utilizada para cerrar acuerdos y conseguir préstamos.
