El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, llegó este martes a Costa Rica para abordar con los países centroamericanos el asunto migratorio, los derechos humanos y temas de cooperación en otras áreas.
Blinken, quien llegó a las 12:45 hora local (18:45 GMT), se reunirá este día con el presidente de Costa Rica, Carlos Alvarado; con el canciller de este país, Rodolfo Solano, y luego sostendrá un encuentro con cancilleres de los países centroamericanos y de México, según la agenda oficial.
Esta es la primera visita de Blinken a un país latinoamericano, lo que el Gobierno costarricense ha celebrado como una muestra del buen estado de las relaciones bilaterales.
El Departamento de Estado estadounidense emitió un pronunciamiento en el que destaca que los desafíos comunes requieren de soluciones conjuntas y que es imperativo que la región y Estados Unidos trabajen juntos en la promoción de la democracia y el buen gobierno, el respeto a los derechos humanos, la seguridad, la prosperidad y el medioambiente.
Agregó que el Gobierno de Joe Biden ha anunciado un paquete de cooperación multianual para Centroamérica por 4 billones de dólares para hacer frente a las causas de la migración irregular, y que hay otra iniciativa de 310 millones de dólares para la seguridad alimentaria y asistencia a comunidades vulnerables.
Sobre Costa Rica, el Departamento de Estado señaló que los lazos bilaterales históricos y que se trata de una de las voces más fuertes y confiables en materia de derechos humanos, democracia y estado de derecho, además de ser un socio importante en la lucha contra el crimen organizado y el narcotráfico.
El Gobierno estadounidense también destacó el apoyo que ha dado Costa Rica a miles de migrantes nicaragüenses y venezolanos en los últimos años, quienes han salido de sus países debido a las crisis sociales políticas y económicas que atraviesan.
Además, el Departamento de Estado subrayó el intercambio comercial que Estados Unidos tiene con Costa Rica, la presencia de más de 200 empresas estadounidenses en el país centroamericano y que unos 120,000 ciudadanos estadounidenses viven en Costa Rica, lo que incluye una importante cantidad de personas jubiladas.