La Justicia de Argentina dará a conocer este viernes la sentencia en el juicio al policía Luis Oscar Chocobar, de 34 años, quien en 2017 mató por la espalda a un joven que asaltó y apuñaló a un turista estadounidense en el barrio de La Boca, en la ciudad de Buenos Aires.
Chocobar, quien estuvo en libertad durante el juicio, está imputado por «homicidio agravado en exceso del cumplimiento del deber».
La víctima de ese crimen fue Juan Pablo Kukoc, de 18 años, quien minutos antes había participado, junto a un cómplice, del robo de una cámara fotográfica al turista Frank Joseph Wolek, de 60, luego de agredirlo con un arma blanca. Mientras escapaba de la escena corriendo, Kukoc, perseguido por Chocobar, cayó al suelo víctima de tres disparos por la espalda, según se pudo constatar en las imágenes grabadas de las cámaras de seguridad de la zona.
La defensa del policía, encabezada por el abogado Fernando Soto, pidió su absolución. Su defensor consideró que el oficial actuó en «legítima defensa», mientras que la Fiscalía solicitó la prisión en suspenso y la querella reclamó prisión perpetua.
En Argentina se produce una muerte cada 20 horas en manos de las fuerzas de seguridad
En tanto, la Fiscalía pidió 18 años de prisión para el cómplice de Kukoc por el delito de «robo agravado cometido con armas, en concurso real con tentativa de homicidio criminis causa» de Wolek .
El de Chocobar es un caso emblemático del llamado ‘gatillo fácil’ en Argentina, donde, según la Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional (Correpi), ocurre una muerte cada 20 horas en manos de las fuerzas de seguridad. El episodio divide a la sociedad entre quienes sostienen que el policía actuó debidamente y en defensa del turista Wolek —quien pudo sobrevivir al ataque— y aquellos que consideran que el efectivo hizo un uso abusivo de su arma reglamentaria, por fuera del protocolo de actuación policial y las leyes.
Este miércoles, el acusado dijo en una entrevista con el diario La Nación que no se consideraba «un héroe» ni tampoco «un asesino». «Soy un ciudadano común que trató de hacer el bien. Intenté cuidar a una persona que estaba siendo lastimada», aseguró.
El polémico video de la defensa
En los alegatos, el abogado de Chocobar presentó un video que recrea la escena del robo y el crimen de Juan Pablo Kukoc con la intención de argumentar ante los jueces la «legítima defensa».
En el cortometraje, realizado con actores en el barrio de La Boca y financiado por la Fundación Policías Bonaerenses Heridos en Actos de Servicio (PO.BO.H.A), se observa un último movimiento de Kukoc antes de recibir el disparo. En medio de la huída, quien interpreta al joven muerto gira con la intención de atacar a Chocobar, que responde con varios balazos.
El letrado Fernando Soto sostuvo en su exposición frente a los jueces Fernando Pisano, Jorge Apolo y Adolfo Calvete, que su cliente tuvo que defenderse efectuando los disparos.
Para Pablo Rovatti, abogado que representa a la madre de Kukoc, las imágenes presentadas por la defensa son «simplemente una filmación sin ningún valor probatorio, que falsea y tergiversa todos los datos objetivos de la causa».
«Hay que decir que esto de armar un video que no condice en lo más mínimo con las pruebas del caso es verdaderamente inusual y llamativo. La tergiversación, de cualquier modo, es tan grosera, que no tenemos ninguna duda de que el tribunal no le va a atribuir ningún valor», afirmó Rovatti a la agencia Télam.
A nivel político, el caso Chocobar es especialmente recordado por el trato que el Gobierno de Mauricio Macri le dio al uniformado apenas cometió el homicidio.
En medio de la polémica que rodeaba al hecho, el oficial de la fuerza municipal de Avellaneda fue felicitado y recibido por el entonces presidente Mauricio Macri en la Casa Rosada, mientras que la exministra de Seguridad, Patricia Bullrich, quien lo defendió desde el primer momento, lo visitó en su casa y lo invitó a su despacho para agradecerle por su accionar.
«Desde el primer día de gestión adoptamos un lema: cuidar a quienes nos cuidan«, dijo en aquel momento. Y añadió que la administración macrista estaba «a su lado y al lado de todos los policías que cuidan a la gente y actúan según su deber».
El apoyo del Gobierno de Cambiemos fue tan explícito que a partir de ese momento comenzó a hablarse de la ‘doctrina Chocobar’ como una postura política del Estado que respalda a las fuerzas de seguridad en el combate a la delincuencia.
Tras el cambio de Gobierno, en diciembre de 2019, el discurso de la Casa Rosada dio un giro rotundo respecto al tema, aunque los casos siguen ocurriendo. El día que asumió la presidencia, Alberto Fernández dijo ante la Asamblea Legislativa: «Debemos escapar al gatillo fácil y a la lógica de la muerte por la espalda».