Cinco niñas centroamericanas de entre 7 años y 11 meses fueron halladas en la frontera en el Valle de Río Grande, en Texas sin ningún adulto que las acompañara, según informó la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por su sigla en inglés) en un comunicado este lunes.
El hallazgo ocurrió el domingo en una granja en los alrededores de Normandy, cerca de San Antonio. Los dueños de la propiedad alertaron a La Patrulla Fronteriza de la presencia de las niñas.
Una bebé de 11 meses de nacionalidad guatemalteca hallada en la frontera cerca de Normandy, Texas
Agentes de la estación de Eagle Pass acudieron a la zona y confirmaron el hallazgo de cinco niñas: tres hondureñas de 7, 3 y 2 años; y dos guatemaltecas de 5 años y 11 meses.
«Es desgarrador encontrar niños tan pequeños que se las arreglan solos en medio de la nada», afirmó en un comunicado Austin Skero II, jefe de la Patrulla Fronteriza del sector Del Río. «Desafortunadamente, esto sucede ahora con demasiada frecuencia», añadió.
«Si no fuera por nuestra comunidad y las autoridades encargadas de hacer cumplir la ley, estas niñas podrían haber enfrentado temperaturas de más de 100 grados sin ayuda», destacó Skero II.
Una mujer que dijo vivir con su esposo en la granja donde fueron encontradas las niñas publicó en la red social Facebook un video en el que se ve a las menores mientras una de sus empleadas atiende a la bebé guatemalteca de 11 meses y aparecen dos hombres al lado de una camioneta en el fondo.
CBP confirmó a nuestra cadena hermana NBC News que las niñas que aparecen en el video publicado por esta persona son los mismos a lo que se refieren en el comunicado de prensa de este lunes.
Las imágenes evocan la situación desesperada de Wilton Gutiérrez, un niño nicaragüense de 10 años hallado por un agente luego de que fuera abandonado a su suerte en la frontera a principios de abril.
Las imágenes del menor no acompañado, llorando y aterrado tras perder al grupo de migrantes con el que había cruzado la frontera se convirtieron en un símbolo del peligro y la dureza del viaje que enfrentan los niños indocumentados al cruzar la frontera solos.
Desde que el presidente, Joe Biden, llegó a la Casa Blanca en enero, la frontera sur ha visto un aumento abrumador de niños que llegan sin la compañía de un padre o adulto. En marzo, el número de menores no acompañados interceptados por agentes fronterizos llegó a casi 19,000, la cifra más alta que se ha registrado.
En un inicio el presidente había dicho que los niños hallados sin sus padres en la frontera serían los únicos que no iban “a dejar sentados allí, al otro lado del río Bravo, solos y sin ayuda”. Esto pudo haber incentivado a los padres a enviar a sus niños en el viaje a Estados Unidos solos.
Sin embargo, Biden rectificó el mensaje un mes más tarde. “No envíe a sus hijos, punto. Están en peligro al hacer ese viaje de 1,000 millas […] Puede solicitar [asilo] desde su país. No tiene que hacer este viaje», dijo en una entrevista al programa Today.
La Patrulla Frotneriza comunicó este lunes que las niñas halladas cerca de Normany no requirieron atención médica y fueron transportadas a la estación de Uvalde para su procesamiento con miras a ser puestas bajo custodia del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS, en inglés).
Hasta el viernes pasado, según datos del Gobierno, HHS tenía bajo su custodia a 21,563 niños indocumentados que ingresaron solos por la frontera, mientras que en instalaciones de CBP habían 631.