El Plan Nacional de Vacunación contra el coronavirus en la República Dominicana se ve mancillado con la colocación de vacunas a figuras públicas y jóvenes que se han saltado la fase que ahora corresponde a adultos mayores de 70 años.
Indignación en la población y descrédito del plan ha cosechado la avalancha de jóvenes que se han vacunado, alegando ser voluntarios, maestros o simplemente dicen que quieren ser ejemplo para la población.
El escándalo más reciente es del bachatero Frank Reyes, quien ha sido blanco de duras críticas tras vacunarse contra el virus sin que le corresponda su turno en las fases dispuesta las autoridades de Salud Pública.
Después de ser atacado, Reyes publicó en sus redes sociales que asumía el compromiso de vacunarse por el simple hecho de dar ejemplo a la población para que acuda a vacunarse.
“Aunque no pertenezco al grupo prioritario de personas a vacunar contra el Covid-19, pero si soy de aquellos que estoy interesado en que la mayoría de la población asista a los centros de vacunación a recibir su primera dosis de vacuna para romper los tabúes sobre dicha vacuna. Yo me vacuné para practicar con el ejemplo, que esto no fue creado para matarnos como muchos creen… acudan a su centro de vacunación”, escribió Reyes.
Otro que se vacunó sin que le corresponda su turno es el expelotero de Grandes Ligas y la pelota local Luis Polonia, de 57 años de edad, quien justificó su inmunización alegando que, “Yo realmente llevé a mi suegro, cuando estábamos allí pedí que me la pusieran y las autoridades a cargo accedieron y me pusieron la vacuna, lo cual agradezco”.
Al expelotero le fue suministrada la dosis en Centro Médico La Unión de Santiago.
Otro de los casos más sonados es el de la comunicadora Brenda Sánchez, quien apareció en cuenta de Twitter en una fotografía con un cartel que dice “Yo me vacuné”. Ésta en un mensaje acompañado de la imagen y dijo que fue vacunada porque pertenece al Voluntariado Jesús con los Niños, que está dentro del Hospital Infantil Regional Universitario Dr. Arturo Grullón.
“Pongo esta foto porque soy muy responsable y jamás haría nada incorrecto, soy voluntaria del Hosp por 23 años trabajo con niños de cáncer y todos debemos ponerla por ellos y me llamaron para eso, el que me conoce sabe que espero mi turno hagamos periodismo responsable”, dijo.
De acuerdo a informaciones suministradas a este diario, personas han asistido a centros de vacunación con la excusa de son maestros sin presentar una identificación y son vacunados contra el virus.
Asimismo, cuidadores de adultos mayores que los acompañan a recibir la dosis para prevenir el Covid-19 resultan ser inmunizados sin que les toque su turno.
Al parecer, las autoridades y el personal médico no tienen ningún control sobre quien puede o no vacunarse, porque solo basta decir en un centro que se es médico, maestro o que atiende aun envejeciente para obtener la dosis, sin que se expida una comprobación al respecto.
Esto es contraproducente cuando hay grupos vulnerables, como los trasplantados, personas de altísimos riesgo que no están contemplados dentro de ninguna de las fases del plan de vacunación.
La primera dama de la República, Raquel Arbaje se pronunció sobre la espera de cada fase para ser vacunado, en su cuenta de Twitter manifestó que cada persona debe esperar sin violentar los turnos de los grupos priorizados por tener mayor riesgo de enfermar o morir. “La solidaridad nos llama. ¡Nadie debe pasar por alto a esa priorización!”
Hasta el momento el país solo ha vacunado al personal médico de primera línea, a los maestros y a los adultos mayores de 70 años con comorbilidades, priorizando aquellos que estén en asilos de ancianos y los más vivos que se han colado sin pertenecer a estos grupos.
SITUACIÓN INTERNACIONAL
No solo en el país se han registrado escándalos sobre este tema, otros de Latinoamérica como Chile, Argentina, Venezuela, Brasil, Ecuador y Perú suenan en los titulares del mundo, debido a que políticos, empresarios y personalidades de alto rango se han saltado el protocolo acorde para combatir el virus.
El escándalo que estalló en Argentina al descubrirse que políticos y sus familiares lograron vacunaciones de privilegio contra el covid-19 se ha convertido en un golpe más duro de lo esperado para el presidente Alberto Fernández.
Lo que desató una ola de repudio en ese país fue el comentario del periodista radial Horacio Verbitsky, que contó que se vacunó gracias a su amistad con quien era en ese momento el ministro de Salud, Ginés González García.
En Argentina se publicó una lista de los 70 vacunados de privilegio, entre los que figuran personas mayores de 60 años, entre ellos el presidente, pero también jóvenes como el ministro de Economía Martín Guzmán, de 38 años, Fernández justificó que era «estratégico» atender a algunos altos funcionarios debido a sus responsabilidades.
Por otro lado, en Brasil, causó indignación el caso de las “vacunas de aire”, con las que ancianos fueron inoculados como parte de una simulación. Ellos pensaban que estaban siendo vacunados, pero recibían, el pinchazo con jeringas vacías o la enfermera a cargo de la aplicación nunca empujaba el émbolo. El asunto se conoció a través de videos que se hicieron virales en redes sociales.
“Si las investigaciones confirman que hubo desvío de dosis, o cualquier otra irregularidad, el profesional de salud podrá ser acusado por el crimen de peculado, que tiene penas que pueden llegar hasta doce años de prisión”, señaló en un comunicado la Policía de Río de Janeiro, de donde vinieron las denuncias.
Grandes ciudades brasileñas como Río de Janeiro, Porto Alegre o Salvador llegaron a suspender las inoculaciones por falta de vacunas, mientras también se reportaban en el país desperdicios de dosis abiertas que perdieron validez antes de ser inyectadas.
El “Vacunagate” en Perú. El destape de severos escándalos fue en el momento en la prensa de ese país sacó a la luz de que alrededor de 487 personas tuvieron acceso en septiembre del 2020 a un exclusivo lote de la vacuna china de Sinopharm, entre los que destacan el expresidente Martín Vizcarra, su esposa y un hermano.
La campaña de vacunación de Chile se ha visto empañada de polémicas, al menos 37mil personas se adelantaron a su turno sin tener factores de riesgo, según datos oficiales.
Este escándalo que fue denominado como el “vacunagate chileno”, incluye a personas menores de 60 años y sin enfermedades crónicas o requerimientos obligatorios para ser parte de los primeros grupos de vacunación.
La polémica que fue desatada en Venezuela con el proceso de vacunación fue a raíz de las declaraciones del presidente Nicolás Maduro, quien dijo que entre los primeros en recibir la inmunización estarían cargos políticos como alcaldes y gobernadores, Y diputados de la Asamblea Nacional, controlada por el oficialismo y entre los que se encuentran su mujer, Cilia Flores, y su hijo, Nicolás Maduro Guerra.
Pero desde diferentes sectores de la oposición se reprocha al gobierno que está siguiendo el criterio de privilegiar a quienes les son leales, que, según ellos, ha sido la tónica en los más de 20 años de dominio chavista.
