La fecha del 14 de marzo es clave en la discusión en el Congreso de Estados Unidos del nuevo paquete de estímulo económico que impulsa la Administración Biden y que contempla una nueva ronda de cheques de $1,400.
La anterior es la fecha límite que se ha propuesto el liderato demócrata para aprobar el paquete de $1.9 billones de dólares que incluye nuevos pagos directos a individuos y familias.
Ese mismo día expiran los beneficios semanales extra por desempleo ($300) aprobados bajo la Ley de Asignaciones Suplementarias en Respuesta y Alivio al Coronavirus del 2021 en diciembre pasado.
Es por esto que los congresistas buscan poder cumplir con el término de tiempo e incluso llevar a votación final antes el paquete para no dejar desprovistos a millones de estadounidenses de recursos adicionales para lidiar con los efectos económicos de la pandemia. La legislación que impulsa el Gobierno de Biden provee para $400 extra semanales hasta septiembre.
La “reconciliación” es el arma de los demócratas
Las provisiones de los demócratas para que la evaluación y aprobación del paquete de estímulo no se extiendan más de lo necesario forman parte de la resolución de “reconciliación” a la que se le dio paso este viernes en ambas Cámaras.
Ayer, tanto la Cámara como el Senado se aprobó la resolución de “reconciliación” de presupuesto que faculta a los comités correspondientes para redactar la legislación de estímulo a partir de la semana próxima.
En una carta a miembros de su Partido, la portavoz de la mayoría en la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, indicó que esperan culminar los trámites para llevar la ley a votación a finales de este mes.
El segundo demócrata de mayor rango en la Cámara, Steny Hoyer, dijo por su parte a reporteros que tratarán de llevar la medida a votación al pleno en la semana del 22 de febrero.
Sin embargo, muchos otros factores podrían incidir en el proceso. Uno de éstos es el juicio político o “impeachment” contra el expresidente Donald Trump que iniciará el martes próximo en el Senado.
Adicional, hay puntos clave de la legislación que no se han podido acordar, como el nivel de ingresos para elegibilidad al tercer cheque de estímulo.
El presidente Joe Biden ha expresado su disposición a negociar la reducción de los umbrales, pero incluso legisladores de su propio partido no respaldan la idea.