Dos meses antes de que terminará la gestación, decidieron llevar a Luana a otro hospital especializado en la ciudad Manaos, para el parto, pero la niña perdió la vida en el camino.
El padre de Luana, Tomé Faba de 36 años, escapó ese mismo día por lo que las autoridades emitieron una orden de arresto contra él, logrando capturarlo una semana después de que su hija perdiera la vida.
Según las declaraciones del jefe de la policía de Coari, Luana era a-bu-sa-da desde que tenía nueve años de edad, cuando acompañaba a su padre en un viaje de pesca. Esa fue la primera vez y ahí empezó una tortuosa vida.
Ella y sus parientes se dieron cuenta del embarazo hasta los cinco meses. Estos intentaron ayudarla para que denunciara a su padre, pero Luana se negó porque este amena-zó con quitarle la vida.
Fue una tía de Luana quien hiso una denuncia ante servicios sociales, ya que la madre de la menor de edad no creía en las acusaciones.
El caso enfadó tanto a la comunidad, que se hicieron varias protestas afuera de la Corte mientras el padre de la niña estaba ahí.
Por otro lado se deberá definir el futuro del pequeño recién nacido para saber si quedará al cuidado de sus familiares o se dará en adopción.
Mientras tanto las autoridades dijeron que el bebé está en buenas condiciones y ya respira por cuenta propia.