Bonao, Monseñor Nouel.-Ayer estuve en calidad de acompañante en la Unidad de Atención a Víctimas de Violencia de Género, Intrafamiliar y Delitos Sexuales de la provincia Monseñor Nouel, pasé una mañana traumática, es increíble el alto nivel de desorganización que allí se vive, mujeres que acuden en busca de ayuda se encuentran un clima de caos, informalidad y desinformación desde que ponen un pié en la inmediaciones.
El asunto se complicó cuando por la celeridad en el accionar del personal, redactaron mal la declaración de la persona que acompañaba, intenté que se corrigiera en el momento y la secretaria no admitió su error, intentaron alegar que la persona que acompañaba estaba diciendo mentiras, esto es grave, porque puede inducir a error y además peligroso porque revictimiza a lavíctima.
Nos convocaron para hoy a las a las 9:00 am, no llegaron hasta pasadas las 10:15 am, me encontré el mismo clima.
Escuchar de una magistrada en una sala de mujeres maltratadas, con brazos rotos entre otras lesiones “las mujeres las matan porque se lo buscan” fué realmente penoso y chocante para mí, sobretodo en el lugar que está supuesto a atender y brindar protección efectiva a las víctimas que atraviesan estas situaciones tan delicadas que deben ser abordadas de manera integral, me llenó de impotencia verlas marcharse con una orden de protección en mano, la mirada baja y el consuelo de un número de teléfono para que llamen en caso de que sus verdugos decidan regresar.
No hay plan de prevención y atención que valga sin respuesta efectiva, sin un régimen de consecuencias para el personal incompetente de las instituciones que trabaja de manera medalaganaria, hay que aspirar a instituciones con personal de respuesta verdaderamente capacitado y sensibilizado en perspectiva de género, que dé un trato solidario y sensible a los casos que allí llegan, de otro modo seguiremos sin proteger de manera efectiva los derechos de las mujeres, niñas y adolescentes