El 2020 se va y una de las muchas lecciones que ha dejado este año marcado por la tragedia de millones de personas tanto por el tema de salud como por la desaceleración económica, ha sido poner a prueba la capacidad de superar las circunstancias adversas por una buena parte de la población en los Estados Unidos.
Y entre este cúmulo de infortunios se encuentra la merma en la capacidad de compra correspondiente a la canasta básica, lo que ha generado también la peor crisis alimentaria en décadas y la necesidad de encontrar nuevas alternativas que permitan adaptarse en un entorno de retos.
Y en una temporada marcada por los convencionalismos sociales, aún hay opciones para llevar a buen puerto estos compromisos, por lo que compartimos 4 consejos para tener una cena especial ajustada a presupuesto de acuerdo a Jessica Fisher, creadora del portal GoodCheapEats.com
1.- Enfoque
El primer paso para ahorrar en este proceso es cambiar la perspectiva con la que se toma la decisión de lo que se comerá, es decir, se trata de adecuarse a las circunstancias de la despensa con la que se cuenta al momento de comenzar a pensar los platillos, así que al menos de que el refrigerador se encuentre vacío, la idea es adaptarse a lo que se tiene y no comprar sin una planeación, por lo que se pueden buscar recetas en línea con base a los ingredientes que ya se tienen, lo cual, además, da pie a la creatividad culinaria y abre posibilidades que quizá no se habían contemplado desde un inicio.
2.- Planeación
Una parte esencial en el ahorro de los comestibles se basa en el aprovechamiento al máximo de los ingredientes con los que se cuenta, por lo que desperdiciar alimentos no es opción. Para ello, es indispensable elaborar un plan que permita incluso contemplar el uso de algunos productos que en principio pudieran parecer que sobran, así que la ide es que todos los alimentos terminen de una u otra forma comiéndose en la mesa.
3.- Congelar
Otro de los elementos que permite extender la vida útil de los alimentos es echar mano del congelador, particularmente si se trata de la temporada invernal y los viajes al supermercado se reducen por las bajas temperaturas, como por las medidas de distanciamiento social y confinamiento recomendadas por las autoridades de salud ante el riesgo de contagios por COVID-19, por lo que entre más lleno se encuentre el congelador, es una mejor apuesta hacia la preservación de los alimentos.https://26f8f9e361bf6aeab7aa1dfd275bd6bf.safeframe.googlesyndication.com/safeframe/1-0-37/html/container.html
4.- Alternativas
En los tiempos que corren, contar con una dieta de carne permanente puede resultar costoso, tanto por el incremento de los precios y su consecuente pérdida del poder adquisitivo, como por las pocas certezas que sobre un sector importante de la población en Estados Unidos siguen imperando debido a la pandemia por coronavirus, por lo que son tiempos de buscar opciones que permitan optar por alimentos más económicos sin sacrificar los valores nutricionales.
