Nueva York. — La ciudad de Nueva York se sumó a una demanda contra el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de Estados Unidos para evitar el recorte de 12 millones de dólares en fondos destinados a la lucha contra el terrorismo en la Autoridad Metropolitana de Transporte (MTA), informó la Fiscalía general del estado.
El alcalde Eric Adams destacó en un comunicado que el sistema de metro es “el alma de nuestra ciudad” y uno de los mayores objetivos terroristas del país. Por ello, subrayó que no se puede permitir perder ni un solo dólar, mucho menos 12 millones, para proteger a los 5,5 millones de pasajeros diarios.
El documento legal advierte que la pérdida de estos fondos no solo pondría en riesgo a los viajeros y turistas del metro, sino también a los 8,5 millones de residentes de la ciudad.
Impacto del recorte y defensa legal
El abogado de la ciudad, Muriel Goode-Trufant, señaló que recortar fondos federales que apoyan la lucha contra el terrorismo de la Policía de Nueva York pone en peligro a toda la población neoyorquina.
La acción legal, presentada como recurso de “amigos de la corte”, se produce después de que el Gobierno federal anunciara la devolución de 187 millones de dólares en subvenciones de seguridad pública, tras las protestas de la gobernadora Kathy Hochul y el Departamento de Policía, responsables de la seguridad en el transporte público.
Uso de los fondos y riesgos para la seguridad
Los 12 millones de dólares recortados serían transferidos de la MTA a la Policía para financiar el entrenamiento y apoyo de unidades especializadas en la detección de explosivos, armas químicas y radiológicas, así como para la prevención y respuesta ante posibles ataques terroristas.
Adams enfatizó que el sistema de metro de Nueva York enfrenta un riesgo mayor de ataques terroristas que cualquier otro sistema de tránsito en el país, y que el Departamento de Seguridad Nacional tiene la obligación de asignar parte de la subvención a la MTA para garantizar la seguridad de los usuarios.
