
Nueva York.– Dos hermanos de origen hispano, descritos por sus allegados como inseparables desde la infancia, dejaron de existir en un siniestro vial ocurrido en horas de la madrugada del domingo en Staten Island, Nueva York. Las víctimas fueron identificadas como Joshua Méndez, de 27 años, y José Pozo, de 26, quienes viajaban junto a un amigo cuando el vehículo en que se desplazaban perdió el control y se volcó tras un impacto con una barrera en la autopista, dejando a los tres ocupantes sin existencia en el lugar.
De acuerdo con el relato difundido por el comunicador Johandry Jiménez, los hermanos habían salido a compartir y disfrutar de la noche, sin imaginar que ese recorrido se convertiría en su último trayecto. El suceso ha causado profunda consternación en la comunidad latina de Staten Island, donde ambos eran reconocidos por su carácter alegre, su unión familiar y su afinidad por la moda, los eventos y la música.
Joshua y José crecieron en una familia numerosa de siete hermanos. Amigos y allegados los describen como jóvenes trabajadores, apasionados por los calzados y la ropa urbana, que asistían juntos a la mayoría de las actividades sociales. Su vínculo era tan fuerte que, según sus familiares, “lo hacían todo en pareja”, reflejo de la cercanía que los unía.
El hecho adquiere un matiz aún más doloroso por las circunstancias personales que rodeaban a ambos. Joshua, el mayor, estaba próximo a celebrar su cumpleaños el 10 de octubre, mientras que la esposa de José esperaba dar a luz ese mismo día, una coincidencia que ha intensificado el dolor de sus seres queridos.

Vecinos, amigos y miembros de la comunidad latina han expresado su pesar en redes sociales, compartiendo imágenes y mensajes en memoria de los jóvenes. Los familiares, visiblemente afectados, agradecieron las muestras de solidaridad y solicitaron respeto durante el proceso de duelo.

Los cuerpos fueron trasladados al Instituto Forense de Staten Island para los procedimientos correspondientes, mientras se coordinan los actos fúnebres en su honor. La comunidad latina de Nueva York permanece unida acompañando a la familia en este momento de tristeza, recordando a Joshua y José como dos hermanos que compartieron sus sueños, su vida y, de manera trágica, su destino final.