
Un niño de 13 años se encuentra en estado crítico tras recibir un disparo en la cabeza ayer a plena luz del día en el estacionamiento de una tienda Dunkin’ en Queens (NYC).
El incidente ocurrió en Linden Boulevard, Cambria Heights, alrededor de las 8:21 a.m. del lunes. Los detectives recuperaron un video de vigilancia que indica que el tiroteo fue selectivo. La Policía de Nueva York dice que el sospechoso se acercó a la víctima y a sus amigos en una motoneta y, tras un intercambio de palabras, disparó una vez, impactando a la víctima en la cabeza. La víctima fue trasladada al Cohen Children’s Medical Center en estado crítico.
“Sólo escuché un ‘pop’ y luego vi a otros niños corriendo por la cuadra”, dijo a ABC News un testigo llamado Ronald Blain. “Cuando salí, vi al chico en el suelo. Sabía que algo pasaba, y normalmente se pelean, pero cuando lo vi tirado, pensé: «No, eso no se ve bien». Y entonces llegó la ambulancia, lo recogieron y no se veía muy bien”.
Blain trabaja en la seguridad en un restaurante McDonald’s en la intersección de los bulevares Linden y Springfield, donde a veces se intensifican las peleas entre los alumnos de tres escuelas cercanas y según él ha intentado calmarlas.
“Se pelean todos los días. Todos los días están aquí, y ahí están los pandilleros y los muchachos peleándose, e intento hablar con ellos, pero es horrible”, afirmó Blain. “¿Qué más se puede hacer? Son nuestro futuro. Algunos escuchan, otros no”»”.
No está claro por qué la víctima pudo haber sido atacada. Los vecinos recordaron a otro chico que murió en la misma intersección y la esquina fue rebautizada en su honor: Kevin Miller, un transeúnte inocente de 13 años, quien salió de un McDonald’s y se encontró con un tiroteo entre pandillas hace 16 años.
“Es otro chico de 13 años, justo en esta misma esquina”, dijo Lance Feurtado, director ejecutivo y fundador de King of Kings Foundation, un grupo que intenta mitigar la violencia en lugares conocidos como éste de la ciudad, donde los niños se reúnen después de la escuela, y les ayuda a llegar sanos y salvos a casa. Ahora temen cualquier posible represalia después de la balacera de ayer. “Sea lo que sea, nos aseguraremos de que se detenga aquí”, dijo.
NYPD celebra una reducción del 23% en los tiroteos este año, de 649 a 500 hasta el domingo 3 de agosto. Los homicidios también disminuyeron 25%, de 241 (2024) a 179 a ese momento en 2025. Sin embargo, la violencia callejera con golpes y armas de fuego y blancas es constante en Nueva York, incluyendo ataques a a agentes de NYPD. Algunas víctimas son alcanzadas al azar. Los enfrentamientos suelen estar vinculados con batallas entre pandilleros por el territorio, y los sospechosos a veces se incriminan al alardear y publicar sobre sus crímenes en las redes sociales.
En julio dos jóvenes, uno de ellos hispano, murieron baleados en la entrada del parque Ferry Point en El Bronx (NYC). En mayo un adolescente fue apuñalado en la cabeza en una calle de Queens (NYC) a media mañana.
En febrero un niño de 14 años fue fatalmente acuchillado en una pelea entre un grupo de estudiantes afuera de un restaurante McDonald’s en Queens el Día de San Valentín. Luego dos adolescentes fueron arrestados por ese homicidio.
En mayo de 2024 cuatro estudiantes fueron acuchillados en un lapso de pocas horas en incidentes dentro y fuera de tres escuelas en Queens, Manhattan y El Bronx. En octubre de 2023 un alumno de 13 años murió acuchillado por otro de 14 al salir de clases dentro de un bus MTA en Staten Island (NYC).
A fines de agosto una mujer de 69 años que caminaba con una andadera fue alcanzada mortalmente en la cara por una bala perdida a una cuadra de su casa durante un tiroteo a plena luz del día en East Harlem, tras salir de un restaurante chino.