Los restos del segundo teniente del Ejército de la República Dominicana, Gregorio Ramírez Pineda, fueron sepultados en su natal San Juan de la Maguana, tras ser asesinado por desaprensivos en la autopista 6 de Noviembre, quienes le arrebataron su arma de reglamento.
El cadáver de Ramírez, de 37 años, fue enterrado en el cementerio municipal de San Juan de la Maguana, con los honores militares correspondientes. Familiares y amigos se mostraron consternados por su muerte, recordándolo como una persona de bien y trabajadora.
El padre del occiso advirtió que no descansará hasta ver a los responsables del crimen tras las rejas. Durante el sepelio, aquellos que conocieron al segundo teniente aprovecharon para lamentar los altos niveles de delincuencia en el país y pidieron a las autoridades policiales tomar medidas drásticas contra los antisociales.
Se recuerda que el teniente habría detenido su vehículo en el kilómetro 5 de la autopista 6 de Noviembre, donde los delincuentes lo asesinaron y le robaron su arma de fuego
